Ella sucumbió a la tentación y acabó comprando esa joya.

El motor se acabó parando.

Él acabó de comprar un carro usado.

Se acabó la batería.

A ella se le acabó el papel.

Se le acabó el papel.

La historia acabó bien.

Se acabó la fiesta.

Una vez, un novato se encontró con Betty, y mientras hacía todo lo que podía para que no le matase, acabó matándose a sí mismo.

Se te acabó el tiempo.

Se os acabó el tiempo.

Se nos acabó el té.

Acabó con sus ahorros apostando.

Ya se acabó.

El verano ya se acabó.

En cuanto acabó su reunión, se pusieron a trabajar.

Se acabó el festival.

El verano se acabó.

El gobierno de Estados Unidos acabó con el mayor terrorista.

Se acabó para el pobre Tom.

Duele saber que todo entre nosotros se acabó.

¿Cuándo acabó?

¿Cuándo se acabó?

Y se acabó, punto final, no quiero oír una palabra más, ¿me oyes?

El sueño se acabó.

Nuestro noviazgo se acabó, y esta vez es para siempre.

Después de discutir con sus padres, Alberto salió de casa nervioso y acabó sufriendo un accidente de tráfico.

Él se acabó de beber una cerveza y pidió otra.

Sé cómo te sientes, pero se acabó.

Nuestro matrimonio se acabó.

¡Oh, no! Se nos acabó la bencina.

Él acabó con su vida saltando de un puente.

El show se acabó.

La función se acabó.

El juego se acabó.

La semana se acabó.

La nieve se acabó fundida en un día.

¡No me llames mi amor! Todo lo que había entre nosotros se acabó.

Se acabó el papel higiénico.

Se acabó el papel del váter.

En un intento de fuga, el bandido acabó con la vida de cuatro rehenes.

Ella suspiró de alivio cuando acabó el trabajo.

Al explicar las oclusivas a la clase, el profesor de lingüística acabó cubierto de saliva en un instante.

Él acabó todo su trabajo.

Rodrigo se puso a jugar al ordenador en cuanto acabó los deberes.

Se acabó el tiempo.

¡Se acabó la partida!

Un estudiante levantó la mano cuando el profesor acabó de leer.

El juego acabó en empate.

El boli se acabó tras haber escrito dos páginas sobre el esperanto.

Se acabó.

Mi compañero de habitación se acabó mi cerveza.

Finalmente se acabó.

Como el juego acabó cero a cero, se decidió a penaltis.

Su paciencia se acabó.

Se me acabó el rollo.

Ayer se acabó el mundo mientras dormía.

Cuando Sara acabó de hablar, notó que Pedro la fulminaba con la mirada.

Cariño, tenemos que ir al supermercado. Se nos acabó la leche.

El batalla de Varo y Arminio acabó como una catástrofe para los romanos.

No pude encontrarme con él en la estación porque se me acabó la gasolina.

Se nos acabó el agua.

Como Juan no estudió nada para el examen final, acabó suspendiendo y tendrá que repetir curso.

Todo se acabó.

Su adicción a las drogas acabó haciéndole robar.

El robo se le fue de las manos y acabó siendo un triple asesinato.

Se acabó todo el dinero.

Jane acabó siendo más alta que su madre.

¿Cuándo acabó usted de escribir la carta?

No acabó bien.

Helen acabó el instituto el año pasado.

Masako acabó el instituto en Japón y después se graduó en Harvard.

El accidente acabó con la filmación.

Ann acabó de pintar el cuadro.

Se nos acabó el dinero.

Mary acabó los deberes de japonés.

Se nos acabó la gasolina cuando íbamos al teatro.

Parece ser que el mundo no se acabó el 21 de diciembre después de todo.

Se le acabó el dinero.

Acabó bien.

No acabó de llenar este formulario.

Se me acabó el dinero.

Él no acabó el maratón.

No quiero que vayas sola y se acabó.

En 1941, cuando acabó la guerra, volvió a su casa desde Europa.

El chico dio un traspiés y acabó en el suelo.

A Tom se le acabó el agua.

El concierto acabó a las diez.

Se puso a llover, y toda la animada actividad en las calles se acabó. Todo se puso silencioso, excepto el sonido de la lluvia.

Todo se acabó, estás solo, y vas a la muerte derecho como un iceberg que se desprende del polvo, cae la noche buscando su corazón en el océano.

El estudiante acabó durmiendo en la clase.

Tom se acabó su sándwich.

La reunión empezó a las dos y media y acabó a las cinco.

Se acabó todo.

Su aliento en su cuello alimentaba su pasión, pero acabó abruptamente en cuanto ella sintió el olor a ajo.

Por fin se acabó todo, ahora podemos descansar.

Hubo de construir el barco con el auxilio de fórmulas mágicas; y en un instante lo acabó de arriba a abajo.

Se complicaron las cosas y todo acabó saliendo mal.

A Alan Turing, uno de los héroes británicos de la Segunda Guerra Mundial, el gobierno inglés lo castró químicamente, al igual que a otros miles de personas, por ser homosexual. Acabó suicidándose.

Bueno, se acabó. ¡Hasta aquí hemos llegado!

Mi hermanastra acabó el restante del zumo de arándano rojo.